La Tercera Escuela Vienesa de Psicoterapia, creada por el neurólogo y psiquiatra austriaco Viktor Frankl es un sistema psicoterapéutico que hace referencia directa al logos, como canal específico de acercamiento a los padecimientos humanos.
Cuando Frankl asume el término logos como sentido y como espíritu se refiere a:
- La urgencia de descubrir y satisfacer la necesidad profundamente humana de vivir una vida con sentido.
- Una vida con sentido es la consecuencia de experimentar vivencias que estén llenas de sentido para cada ser humano.
- La motivación humana básica es la búsqueda de lo que tiene sentido en nuestra vida es decir, la Voluntad de Sentido y no la búsqueda del placer o la búsqueda del poder.
Esta “voluntad de sentido” se entiende como la aspiración de todo ser humano para percibir la propia vida como revestida de sentido como digna de ser vivida. Considerando que el ser humano es un ser libre para buscar el sentido de su vida, para decidir y asumir las consecuencias de sus elecciones.
La logoterapia como sistema psicoterapéutico quiere aportar algo fundamental:
Que los momentos difíciles de la vida, los padecimientos mentales, el sufrimiento y el desarrollo humano no pueden verse solamente desde la perspectiva somática y psicológica, porque el ser humano se constituye en su auténtica y genuina humanidad cuando se hace presente la dimensión existencial – espiritual arraigada en la libertad y la responsabilidad ante la propia vida.
La logoterapia va más allá de que la persona concreta sea persona creyente o no, porque los mismos principios analíticos – existenciales de la logoterapia señalan la presencia del inconsciente espiritual.